Un día, un monje le preguntó a su maestro: «Maestro, ¿cómo puedo alcanzar la iluminación?» El maestro respondió: «Cuando tengas hambre, come. Cuando estés cansado, duerme». El monje se quedo confundido y dijo: «Pero eso es lo que hace todo el mundo». El maestro sonrió y dijo: «Eso no es cierto. Cuando tienes hambre, estás pensando en cien cosas. Cuando estás cansado, te preocupas por mil problemas. Si quieres alcanzar la iluminación, debes estar completamente presente en cada momento de tu vida.”

Cuento atribuido a Yunmen Wenyan (maestro Zen de la dinastía Tang en China)